Infantil

Crecen tan rápido...

El retrato infantil es un retrato lleno de emoción y autenticidad. 

La mirada de los niños y niñas es algo incomparable por su transparencia, su ternura, su inocencia. 

Se disfruta hoy al tener su imagen en fotografías, pero cuando pasan los años y puedes volver a su infancia a través de ellas, es cuando realmente se valora haber decidido tomarles unos retratos como se merece, que hablen de ellos en aquel momento de sus vidas.

Sus gestos espontáneos, esas expresiones tan suyas, quedan grabados en sus imágenes.



Mientras los pequeños crecen, cualquier momento es bueno para guardar un recuerdo en forma de retrato, sólo o con hermanos. 

Las sesiones con ellos son dinámicas y divertidas. En un ambiente estimulante para que se muestren en su mejor versión. 

Suelen tener una hora de duración aproximadamente. Durante este tiempo trato que se sientan cómodos, sin poses forzadas ni presión, simplemente dejándolos ser. 

A partir de ahí, ellos mandan. Si les apetece podemos alargar un rato más o finalizar cuando se cansen. 

¡Son sus fotos!